Este es un blog creado para poder compartir, opinar y discutir varios aspectos que hemos podido recolectar en la internet, y en diferentes textos que nos podrán ayudar a entender de mejor manera la situación laboral, social, cultural y económica de nuestros compatriotas en tierras Canadienses.
jueves, 22 de noviembre de 2012
ANALICEMOS
¿Cómo entender la identidad? ¿Opera la identidad en forma de hibridación?
La identidad se da como un proceso de reconocimiento, tanto de un entorno cultural como de un colectivo social, que permite un sistema de relaciones e interacciones entre individuos bajo un patrón similar de comportamiento.
Ahora bien, si existen estas condiciones -adquiridas en un entono determinado-, el individuo al trasladarse a un nuevo entorno por un periodo de tiempo, suficiente para adaptarse a este nuevo entorno, genera vínculos de identificación con los sujetos que habitan en ese nuevo entorno.
Considerando la imposibilidad de este individuo de deshacerse del bagaje cultural e identitario original, se empieza a establecer en él un proceso de hibridación identitario, con un resultado de mixtura entre ambos elementos, los cuales le permiten adaptarse con facilidad a ambos entornos, pero que, pueden significar un desvinculamiento identitario de ambas condiciones estructurales a nivel social.
Creo que debemos partir por el término hibridación, si bien la RAE, menciona lo siguiente: híbrido,(Del lat. hybrĭda).
adj. Biol. Dicho de un individuo: Cuyos padres son genéticamente distintos con respecto a un mismo carácter. adj. Se dice de todo lo que es producto de elementos de distinta naturaleza.
Como resultado vemos que es la unión o fusión de dos elementos de distinta naturaleza, si bien es cierto se nos pidió que analicemos la Asociación de Ecuatorianos en Ontario(AEO), obviamente podemos vislumbrar que es un clarísimo ejemplo de esta llamada hibridación, la AEO, se encarga de difundir, cultivar y mantener la cultura ecuatoriana, en tierras canadienses. Tenemos al migrante ecuatoriano, producto de muchos varios elementos que lo identifican como tal, cultura, costumbres, etc. al llegar a tierras extrajeras, en este caso Canadá, la cultura o identidad ecuatoriana no se pierde sino que mas bien ésta se acentúa más profundamente, obviamente una vez estando allá en Canadá necesariamente debe adoptar elementos de la cultura Canadiense para su mejor desempeño, y tener mayores facilidades, me refiero a lengua, horas laborales en Canadá, gastronomía, el clima, etc, dicha hibridación se da puntualmente en el ser individual de cada migrante, en todos y cada uno de los migrantes que se encuentran en Canadá, tal vez en unos casos dicha hibridación se pueda ver mas fuerte , en otros casos mas débilmente, pero creo que todo migrante ecuatoriano en tierras no solo Canadienses, sino en todo país al que ha decidido ir, por lo menos tienen una pequeña bandera recordando a la tierra que lo vio nacer, y varios otros elementos que no lo harán olvidar que es ecuatoriano, estando en el exterior se extraña todo lo que representa al Ecuador, gastronomía, himnos, música, cosas buenas, cosas malas, lastimosamente ya no se puede volver a la patria, pues se ha tomado a la tierra extraña como suya para un mejor porvenir, es ahí que se produce dicha hibridación, incluso podemos ver que es sumamente importante y trascendental la hibridación, que en el ámbito legal algunos países aceptan y permiten la doble ciudadanía, teniendo un individuo identificado con la tierra que lo vio nacer pero también identificado con la tierra en la que ha decidido hacer su vida.
Artículo sobre como la globalización / migracion ha afectado a la concepción de la creación de la cultura, y la identidad. Basado en una propuesta de García Canclini.
“García Canclini habla sobre el desplazamiento del estudio de la identidad al de la “hibridación cultural”, Para este autor la identidad es “una construcción que se relata”(1) se va formando a través de historias en torno a un territorio, un suceso, unos determinados medios e intereses económicos, por lo tanto la idea de identidad cultural no puede ser cerrada e individual, ya que cada vez más se construye por comunidades desterritorializadas, no solo en oposición al otro sino como una construcción y coproducción con el otro. Por tanto más que hablar de identidad individual, este autor sugiere que hay “identidades y pertenencias múltiples que dan lugar a culturas híbridas” (2). Este término surge de sus estudios sobre la identidad en América Latina y se refiere a los “procesos socioculturales en los que estructuras o prácticas discretas, que existían en forma separada, se combinan para generar nuevas estructuras, objetos y prácticas” (3). La hibridación cultural vas más allá de la simple mezcla racial, étnica y/o religiosa: es la coexistencia de muchos estratos culturales diferentes en un mismo nivel. En la actualidad pueden convivir, lo tradicional con lo moderno, lo popular con lo culto, lo local con lo global, sin embargo, esta coexistencia está lejos de ser equilibrada, ya que la capacidad tecnológica, los medios de comunicación y la economía que también se interrelacionan inciden sobre la capacidad de subsistir de comunidades más frágiles que se siguen resistiendo a la hegemonía cultural. Este tipo de proceso cultural encuentra su lugar idóneo en las grandes ciudades y en las fronteras, espacios caracterizados por sus desplazamientos y desplazados. En la actualidad, los intereses de los estados-nación residen en mantener su soberanía territorial con leyes que intentan controlar más y más sus fronteras por lo que se refiere al flujo de personas, pero no en cuanto a los movimientos de capitales e intercambio de mercados. Esto ha hecho que el concepto de frontera haya variado su campo semántico y se haya convertido en el espacio límite que no pueden atravesar muchos seres humanos, a pesar de que las nuevas unidades económicas generadas por tratados (unión europea, Alca, Alba, entre otros) den por sentada su desaparición. Los emigrantes tanto los que se trasladan de las zonas rurales a las ciudades, como aquellos que se mudan a otro país, son la población más susceptible de vivir estos procesos de hibridismo cultural, ya que como resalta García Canclini “la mayoría de la gente es consciente sobre todo de una cultura, un ambiente, un hogar; los exiliados son conscientes de por lo menos dos, y esta pluralidad de visión da lugar a una consciencia que -para utilizar una expresión de la música- es contrapuntística”(4) su experiencia y vivencia siempre está en referencia a otra ya vivida, pero ambas se dan de manera simultánea en él. Este mundo globalizado, en donde cada día se forman espacios de desplazamientos voluntarios o no, en donde se originan cada vez mas comunidades diasporitas que van creando, produciendo y cambiando el paisaje real he imaginado, debería ser pensado como un nuevo mundo de modos, redes e intersecciones, en donde tenemos la oportunidad cruzarnos con el otro en el mismo espacio y coexistir, creando un nuevo tipo de sociedad en donde “la convivencia sea menos incomprensiva, con menores malentendidos, que en los tiempos de la colonización y el imperialismo”(5).
Partiendo de los fenómenos de migración y la crisis de las retóricas defensivas del Estado- Nación y la concepción de territorio, es además necesario pensar en una resignificación del concepto de "identidad"; debido a que él se ha entendido como algo que tiene asignado una sociedad desde un territorio fijo, y ligada íntimamente a la “cultura nacional”. Esta resignificación es la que abre puertas a la concepción de una hibridación de la identidad, pués ésta hace de la identidad algo nómada, maleable, móvil y transgresiva. Es así que el autor Néstor García Canclini, en su texto, “Culturas híbridas”, afirma que “La hibridación responde a procesos socioculturales en los que estructuras o prácticas discretas, que existían en forma separada, se combinan para generar nuevas estructuras, objetos y prácticas”. Es importante analizar junto con los procesos migratorios, un factor de gran importancia, el cual es la historia de los movimientos identitarios. En un mundo de procesos migratorios tan importantes y de fenómenos aún más interesantes que viene junto a ellos, las “sedimentaciones identitarias” se reestructuran en medio de agregados interétnicos y transnacionales (entre otros).
La identidad se da como un proceso de reconocimiento, tanto de un entorno cultural como de un colectivo social, que permite un sistema de relaciones e interacciones entre individuos bajo un patrón similar de comportamiento.
ResponderEliminarAhora bien, si existen estas condiciones -adquiridas en un entono determinado-, el individuo al trasladarse a un nuevo entorno por un periodo de tiempo, suficiente para adaptarse a este nuevo entorno, genera vínculos de identificación con los sujetos que habitan en ese nuevo entorno.
Considerando la imposibilidad de este individuo de deshacerse del bagaje cultural e identitario original, se empieza a establecer en él un proceso de hibridación identitario, con un resultado de mixtura entre ambos elementos, los cuales le permiten adaptarse con facilidad a ambos entornos, pero que, pueden significar un desvinculamiento identitario de ambas condiciones estructurales a nivel social.
Peter Skerrett
Creo que debemos partir por el término hibridación, si bien la RAE, menciona lo siguiente: híbrido,(Del lat. hybrĭda).
ResponderEliminaradj. Biol. Dicho de un individuo: Cuyos padres son genéticamente distintos con respecto a un mismo carácter.
adj. Se dice de todo lo que es producto de elementos de distinta naturaleza.
Como resultado vemos que es la unión o fusión de dos elementos de distinta naturaleza, si bien es cierto se nos pidió que analicemos la Asociación de Ecuatorianos en Ontario(AEO), obviamente podemos vislumbrar que es un clarísimo ejemplo de esta llamada hibridación, la AEO, se encarga de difundir, cultivar y mantener la cultura ecuatoriana, en tierras canadienses.
Tenemos al migrante ecuatoriano, producto de muchos varios elementos que lo identifican como tal, cultura, costumbres, etc. al llegar a tierras extrajeras, en este caso Canadá, la cultura o identidad ecuatoriana no se pierde sino que mas bien ésta se acentúa más profundamente, obviamente una vez estando allá en Canadá necesariamente debe adoptar elementos de la cultura Canadiense para su mejor desempeño, y tener mayores facilidades, me refiero a lengua, horas laborales en Canadá, gastronomía, el clima, etc, dicha hibridación se da puntualmente en el ser individual de cada migrante, en todos y cada uno de los migrantes que se encuentran en Canadá, tal vez en unos casos dicha hibridación se pueda ver mas fuerte , en otros casos mas débilmente, pero creo que todo migrante ecuatoriano en tierras no solo Canadienses, sino en todo país al que ha decidido ir, por lo menos tienen una pequeña bandera recordando a la tierra que lo vio nacer, y varios otros elementos que no lo harán olvidar que es ecuatoriano, estando en el exterior se extraña todo lo que representa al Ecuador, gastronomía, himnos, música, cosas buenas, cosas malas, lastimosamente ya no se puede volver a la patria, pues se ha tomado a la tierra extraña como suya para un mejor porvenir, es ahí que se produce dicha hibridación, incluso podemos ver que es sumamente importante y trascendental la hibridación, que en el ámbito legal algunos países aceptan y permiten la doble ciudadanía, teniendo un individuo identificado con la tierra que lo vio nacer pero también identificado con la tierra en la que ha decidido hacer su vida.
Santiago Jones
Artículo sobre como la globalización / migracion ha afectado a la concepción de la creación de la cultura, y la identidad. Basado en una propuesta de García Canclini.
ResponderEliminar“García Canclini habla sobre el desplazamiento del estudio de la identidad al de la “hibridación cultural”, Para este autor la identidad es “una construcción que se relata”(1) se va formando a través de historias en torno a un territorio, un suceso, unos determinados medios e intereses económicos, por lo tanto la idea de identidad cultural no puede ser cerrada e individual, ya que cada vez más se construye por comunidades desterritorializadas, no solo en oposición al otro sino como una construcción y coproducción con el otro.
Por tanto más que hablar de identidad individual, este autor sugiere que hay “identidades y pertenencias múltiples que dan lugar a culturas híbridas” (2). Este término surge de sus estudios sobre la identidad en América Latina y se refiere a los “procesos socioculturales en los que estructuras o prácticas discretas, que existían en forma separada, se combinan para generar nuevas estructuras, objetos y prácticas” (3).
La hibridación cultural vas más allá de la simple mezcla racial, étnica y/o religiosa: es la coexistencia de muchos estratos culturales diferentes en un mismo nivel. En la actualidad pueden convivir, lo tradicional con lo moderno, lo popular con lo culto, lo local con lo global, sin embargo, esta coexistencia está lejos de ser equilibrada, ya que la capacidad tecnológica, los medios de comunicación y la economía que también se interrelacionan inciden sobre la capacidad de subsistir de comunidades más frágiles que se siguen resistiendo a la hegemonía cultural.
Este tipo de proceso cultural encuentra su lugar idóneo en las grandes ciudades y en las fronteras, espacios caracterizados por sus desplazamientos y desplazados. En la actualidad, los intereses de los estados-nación residen en mantener su soberanía territorial con leyes que intentan controlar más y más sus fronteras por lo que se refiere al flujo de personas, pero no en cuanto a los movimientos de capitales e intercambio de mercados. Esto ha hecho que el concepto de frontera haya variado su campo semántico y se haya convertido en el espacio límite que no pueden atravesar muchos seres humanos, a pesar de que las nuevas unidades económicas generadas por tratados (unión europea, Alca, Alba, entre otros) den por sentada su desaparición.
Los emigrantes tanto los que se trasladan de las zonas rurales a las ciudades, como aquellos que se mudan a otro país, son la población más susceptible de vivir estos procesos de hibridismo cultural, ya que como resalta García Canclini “la mayoría de la gente es consciente sobre todo de una cultura, un ambiente, un hogar; los exiliados son conscientes de por lo menos dos, y esta pluralidad de visión da lugar a una consciencia que -para utilizar una expresión de la música- es contrapuntística”(4) su experiencia y vivencia siempre está en referencia a otra ya vivida, pero ambas se dan de manera simultánea en él.
Este mundo globalizado, en donde cada día se forman espacios de desplazamientos voluntarios o no, en donde se originan cada vez mas comunidades diasporitas que van creando, produciendo y cambiando el paisaje real he imaginado, debería ser pensado como un nuevo mundo de modos, redes e intersecciones, en donde tenemos la oportunidad cruzarnos con el otro en el mismo espacio y coexistir, creando un nuevo tipo de sociedad en donde “la convivencia sea menos incomprensiva, con menores malentendidos, que en los tiempos de la colonización y el imperialismo”(5).
Carolina Caicedo
Partiendo de los fenómenos de migración y la crisis de las retóricas defensivas del Estado- Nación y la concepción de territorio, es además necesario pensar en una resignificación del concepto de "identidad"; debido a que él se ha entendido como algo que tiene asignado una sociedad desde un territorio fijo, y ligada íntimamente a la “cultura nacional”. Esta resignificación es la que abre puertas a la concepción de una hibridación de la identidad, pués ésta hace de la identidad algo nómada, maleable, móvil y transgresiva. Es así que el autor Néstor García Canclini, en su texto, “Culturas híbridas”, afirma que “La hibridación responde a procesos socioculturales en los que estructuras o prácticas discretas, que existían en forma separada, se combinan para generar nuevas estructuras, objetos y prácticas”. Es importante analizar junto con los procesos migratorios, un factor de gran importancia, el cual es la historia de los movimientos identitarios. En un mundo de procesos migratorios tan importantes y de fenómenos aún más interesantes que viene junto a ellos, las “sedimentaciones identitarias” se reestructuran en medio de agregados interétnicos y transnacionales (entre otros).
ResponderEliminarMaría José García